En el país de los trequetés

Ana Maria Machado

Ilustraciones de Sandra de la Prada

Traducción de Isabel Soto

LUCES, TELÓN Y... ¡DIVERSIÓN!

¿A quién no le gusta reír? ¿Y jugar? ¿Y las aventuras? ¡Pues este es el libro adecuado para conseguirlo!

En el país de los trequetés todo vale, o todo se pue-de, o... ¿Nada estaba prohibido? Sea como fuere, vamos a adentrarnos en un mundo lleno de humor y fantasía. Ojo, porque el libro tiene efectos secundarios: después de leerlo es posible sentir unas ganas locas de cambiar el mundo... ¡¡¡Para mejorarlo!!!

La puesta en escena de esta obra es sencilla. Tiene un solo acto y puede representarse sobre un escenario, pero también en un aula o en un cuarto de juegos. Solo hay que echarle ganas e imaginación.

El libreto consta de catorce personajes: nueve son humanos y cinco son muñecos. Estos últimos pueden ser manipulados por actores, o bien ser representados por niños disfrazados de muñecos. Por otra parte, la mayoría de los personajes pueden interpretarse por chi-cos o por chicas, de modo que el reparto se adaptará fácilmente a las características específicas del grupo que se lance a esta aventura.

Y para quienes prefieran no actuar, hay otras mu-chas tareas necesarias y divertidas: vestuario, atrezo, decorados, maquillaje, luces, sonido... Las obras de teatro salen adelante gracias al trabajo en equipo.

¡Que comience la función!

7

¿DE QUÉ TRATA LA OBRA?

La protagonista de esta historia es Anita. A ella le gusta hacer las cosas de una manera diferente a la mayoría de la gente, y no soporta a los mandones ni obedecer órdenes sin ton ni son. Sus amigos no entienden ese empeño suyo por cuestionarlo todo, así que Anita deci-de viajar por el mundo para averiguar cómo hacen las cosas los demás. ¿Qué aventuras le esperan a lo largo de ese viaje? ¿Qué comerá? ¿Dónde dormirá? A ella no le preocupa porque, según dice, «el hambre agudiza el ingenio».

La obra fomenta valores como la amistad, la tole-rancia, la empatía, la cooperación... Nos anima a refle-xionar sobre las posibilidades que ofrece el mundo que nos rodea, a mirar de otro modo. Y a descubrir el país de los trequetés, donde cada uno es libre de hacer lo que le apetezca. Aunque a veces eso no sea tan diver-tido como parece.

Para descubrirlo, solo hay que pasar la página... ¡y seguir leyendo! ¡Adelante!

9

PERSONAJES

14, por orden de aparición:

Nacho

Leo

Lucía

Quico

Anita

Trequeté

Trucutú

Trocotó

Tracatá

Triquití

Manuel

Sebastián

Pepa

Antonio

La obra tiene catorce personajes. Lo más sencillo es adaptarse a este elenco, pero existen otras posibilida-des de reparto.

Si contamos con menos actores, podemos hacer que cada niño o niña encarne a varios personajes. Esto es fácil si las escenas que se desarrollan en el país de los trequetés se llevan a cabo con muñecos o títeres que manejen los propios actores. Otra posibilidad es que los que interpretan al principio al grupo de amigos actúen más tarde como el coro de trabajadores; solo tienen que cambiar de vestuario.

11

Ahora bien, si contamos con más de catorce acto-res y queremos que todos participen, también es posi-ble ampliar el número de personajes. Por ejemplo, du-rante la representación del cuento de Malasartes, este pícaro y la anciana pueden ser representados por dos niños distintos a los que hacen de Anita y Leo. Tam-bién quedaría muy lucido que apareciera en escena un grupo nutrido de niños y niñas cantando y bailando cada vez que surge una canción o acompañando al grupo de trabajadores mientras construyen la casa.

Las posibilidades de esta obra son muy amplias. Solo hace falta poner buena voluntad ¡y divertirse!

12

Amigos

Conformado por dos niñas y tres niños, aunque el género puede cambiar en función de las necesidades de cada grupo. Sus edades oscilan entre los siete y los diez años.

Anita

Es la protagonista de la his-toria. Imaginativa, soñadora, entusiasta e inconformista. Le gusta jugar con sus ami-gos y plantearse el porqué de las cosas, pero a veces se muestra demasiado testa-ruda y le cuesta ceder ante las preferencias de los de-más. No entiende de impo-siciones ni de órdenes in-justificadas. Sabe muchos cuentos y leyendas. Reco-noce bien las emociones propias y las de los demás. Es valiente y decidida; por eso no tiene miedo de em-prender un viaje por el mun-do y aprender cosas nuevas.

13

Nacho

Es una persona muy prag-mática y tal vez algo descon-fiada. Piensa que las nor-mas están para obedecerse y no para ser cuestionadas. Le gusta hacer las cosas de forma rápida y ordenada, sin perder el tiempo en buscar alternativas ni hablar más de lo necesario. Pero también sabe escuchar, es responsa-ble y tiene un sentido de la justicia muy desarrollado.

Leo

Es simpático y proactivo. Le gusta mandar y organizar los juegos, y esto hace que pueda chocar un poco con Anita, pero también sabe ceder cuando se da cuenta de que no lleva la razón.

14

Lucía

Es comprensiva y paciente. Preferiría que Anita no para-se los juegos todo el tiempo, pero entiende que las cosas, a veces, no son como a una le gustaría que fueran. Ade-más es muy alegre, y disfruta con la imaginación de su ami-ga y su forma diferente de ver las cosas.

Quico

Es un niño muy movido: más de acción que de diálogo. Detesta el aburrimiento y, a veces, se muestra impa-ciente con Anita por su ma-nía de interrumpir los jue-gos para reflexionar sobre ellos. Le gusta mucho «el rey manda», pero también es imaginativo y abierto, por lo que está dispuesto a pro-bar otros juegos y nuevas formas de ver las cosas.

15

Trucutú

Muñeco de color violeta. Le encanta jugar a hacer acro-bacias. Si se cae, no se desa-nima y vuelve a intentarlo.

Muñecos

Son los trequetés. Viven en un país donde «todo se puede», es decir, que está prohibido prohibir... Aunque eso ya sería una prohibición, ¿no? Digamos que tienen libertad para ha-cer lo que les venga en gana.